La Xunta pretende iniciar la obra del puerto de Cabo en primavera
Tanto la consellería como las entidades de O Castro creen que la dársena será un referente en la ría
Los trabajos en el muelle boirense, que contarán con diez millones de presupuesto, se prolongarán dos años CRONOLOGÍA
María Hermida
Cabo de Cruz lleva más de una década esperando por la obra del puerto; una histórica actuación que permitirá solucionar las enormes carencias de espacio y abrigo de los barcos pesqueros y, a la vez, dotar a Boiro de la primera dársena deportiva. Los años de demora y los plazos incumplidos han conseguido que, solo con el hecho de que el Consello da Xunta haya autorizado una inversión de diez millones de euros para la zona-un trámite que se superó el jueves-, las sonrisas aflorasen. Pero la alegría es contenida, ya que son muchos los que aguardan a ver a los obreros trabajando para descorchar el champán. Sin embargo, si se cumplen las previsiones de Política Territorial, la fiesta no tardará en llegar: la Xunta cuenta con iniciar la actuación en la primavera del 2008.
Jacinto Parga, presidente de Portos de Galicia, indicó ayer que el primer paso a dar, ahora que el Gobierno se ha pronunciado a favor de la obra, es sacar a concurso los trabajos. La previsión es tener ese trámite en marcha en unos quince días. A partir de ahí, se calcula que el proceso de licitación dure tres meses y que, en marzo, pueda estar la intervención adjudicada a una empresa. Para entonces, manos a la obra.
Hasta el 2010
Parga entiende que los trabajos se demorarán 24 meses, por lo que se puede hablar de que hasta el 2010 la ampliación del muelle y la construcción del dique deportivo no estarán listos. «Calculo que tendrán que pasar dos veranos para que las obras puedan ir terminando», aseguró ayer el responsable del ente público.
Más allá de los plazos, en Boiro y en los despachos de Portos de Galicia coincidían al hablar de dos cuestiones: la repercusión que tendrá esa mejora para el municipio y la paciencia y perseverancia que manifestaron las entidades locales en su incansable lucha por esta infraestructura.
En cuanto a la primera, el propio Jacinto Parga señaló que se trata de la segunda obra más importante, en cuanto a inversión se refiere, de la historia de Portos de Galicia. «Está la de Burela, que es un poco más, y luego esta», dijo. Y añadió: «El de Cabo de Cruz será un puerto referente en la ría de Arousa, no hay duda».
Desde Boiro, en lugar de pensar en lo que será, ayer, sobre todo, se hablaba de lo que dejará de ser la dársena de Cabo de Cruz. Bateeiros y cofradía recordaban que la reforma del muelle permitirá acabar con el histórico problema de falta de abrigo que todos los años provoca cuantiosas pérdidas, y también con la carencia de espacio. El club náutico añadía que el municipio dejará de ser el único de la ría sin un puerto deportivo dentro de su territorio.
Tanto la consellería como las entidades de O Castro creen que la dársena será un referente en la ría
Los trabajos en el muelle boirense, que contarán con diez millones de presupuesto, se prolongarán dos años CRONOLOGÍA
María Hermida
Cabo de Cruz lleva más de una década esperando por la obra del puerto; una histórica actuación que permitirá solucionar las enormes carencias de espacio y abrigo de los barcos pesqueros y, a la vez, dotar a Boiro de la primera dársena deportiva. Los años de demora y los plazos incumplidos han conseguido que, solo con el hecho de que el Consello da Xunta haya autorizado una inversión de diez millones de euros para la zona-un trámite que se superó el jueves-, las sonrisas aflorasen. Pero la alegría es contenida, ya que son muchos los que aguardan a ver a los obreros trabajando para descorchar el champán. Sin embargo, si se cumplen las previsiones de Política Territorial, la fiesta no tardará en llegar: la Xunta cuenta con iniciar la actuación en la primavera del 2008.
Jacinto Parga, presidente de Portos de Galicia, indicó ayer que el primer paso a dar, ahora que el Gobierno se ha pronunciado a favor de la obra, es sacar a concurso los trabajos. La previsión es tener ese trámite en marcha en unos quince días. A partir de ahí, se calcula que el proceso de licitación dure tres meses y que, en marzo, pueda estar la intervención adjudicada a una empresa. Para entonces, manos a la obra.
Hasta el 2010
Parga entiende que los trabajos se demorarán 24 meses, por lo que se puede hablar de que hasta el 2010 la ampliación del muelle y la construcción del dique deportivo no estarán listos. «Calculo que tendrán que pasar dos veranos para que las obras puedan ir terminando», aseguró ayer el responsable del ente público.
Más allá de los plazos, en Boiro y en los despachos de Portos de Galicia coincidían al hablar de dos cuestiones: la repercusión que tendrá esa mejora para el municipio y la paciencia y perseverancia que manifestaron las entidades locales en su incansable lucha por esta infraestructura.
En cuanto a la primera, el propio Jacinto Parga señaló que se trata de la segunda obra más importante, en cuanto a inversión se refiere, de la historia de Portos de Galicia. «Está la de Burela, que es un poco más, y luego esta», dijo. Y añadió: «El de Cabo de Cruz será un puerto referente en la ría de Arousa, no hay duda».
Desde Boiro, en lugar de pensar en lo que será, ayer, sobre todo, se hablaba de lo que dejará de ser la dársena de Cabo de Cruz. Bateeiros y cofradía recordaban que la reforma del muelle permitirá acabar con el histórico problema de falta de abrigo que todos los años provoca cuantiosas pérdidas, y también con la carencia de espacio. El club náutico añadía que el municipio dejará de ser el único de la ría sin un puerto deportivo dentro de su territorio.
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